Mucho se habla hoy en día acerca del big data y del potencial del análisis de datos o data science. Parece innegable el hecho de que es imprescindible tener la máxima información posible y analizarla de forma inteligente para implementar la ciencia de datos en las campañas de marketing. No obstante, a veces todos estos términos pueden quedar en algo demasiado genérico, difícil de entender en su aplicación. En este artículo titulado “Big data aplicaciones: ejemplos reales de la tecnología al servicio del data science” queremos ejemplificar el uso del big data en el marketing mediante algunos casos reales.
“Big data” aplicaciones: conociendo el verdadero potencial del análisis de datos
Para muestra, un botón. La mejor forma de entender qué es lo que el big data puede hacer por un negocio, una institución o una empresa es a través de ejemplos. A continuación te contamos algunos casos reales de aplicación de la ciencia de datos en los campos de la política, la economía, la sanidad, la automoción o el deporte.
El análisis de datos en la política
Uno de los ámbitos en los que el big data ha tenido un papel más relevante, y también polémico, ha sido en la política. Ya en el año 2012, el presidente Obama planificaba su reelección basándose en el análisis de datos. Congregó un equipo de expertos en big data con tres objetivos principales:
- Registro: recoger datos de sus actuales votantes.
- Persuasión: localizar a los indecisos y convencerlos para ganar sus votos.
- Participación: movilizar a los votantes para que, efectivamente, acudan a la votación.
Es probable que el hecho de que el equipo de análisis datos, el de trabajo de campo y el de comunicación trabajaran al unísono sea, además del uso del big data, la otra clave del éxito de la campaña de Obama. Años más tarde, el presidente Trump hacía lo propio para conseguir más votantes: otro caso de éxito del uso del big data de forma estratégica.
Finanzas y “big data”
El mundo de la banca y de las finanzas se está activando de manera considerable y está entrando de lleno en el uso de los datos para mejorar su rendimiento. Y es que, si lo pensamos bien, nuestro banco tiene muchísima información acerca de nuestros hábitos de consumo. Información por la que muchas empresas sueñan con tener:
- cuáles son nuestros ingresos
- a qué comercios solemos acudir
- cuánto gastamos en cada uno de ellos
- qué tipo de tiendas online visitamos
- cuáles de nuestros establecimientos favoritos son físicos
- qué cantidad de nuestros ingresos ahorramos
- qué cantidad gastamos…
Asimismo, con estos datos analizados a gran escala, las estadísticas poblacionales que permite toda esta información no tienen fin.
“Big data” en sanidad
Los progresos que se están consiguiendo en el mundo de la investigación médica son espectaculares. Gracias al big data no solo se logra conseguir información y estadísticas, vitales para muchos estudios, como por ejemplo para estudiar patrones de propagación de enfermedades; también es posible descodificar nuestro ADN y detectar posibles enfermedades (incluso sin síntomas) o conocer los alimentos más adecuados para nuestro cuerpo.
Otro ejemplo de big data aplicaciones: un hospital de Toronto monitoriza a los bebés recién nacidos y, gracias a la programación de ciertos algoritmos, son capaces de detectar infecciones incluso 24h antes de que éstas aparezcan.
Uso inteligente de la información en la automoción
Seguro que has oído hablar de los coches sin conductor. La inteligencia artificial y el big data se unen en el terreno de la automoción para fabricar vehículos que conducen de forma autónoma. Gracias a las cámaras, a sensores, GPS e internet, los coches autónomos permiten desplazar carga o pasajeros sin necesidad de conductor. De hecho, se estima que en el año 2030, no sería necesario conducir, sino simplemente dejarnos llevar por estos vehículos.
“Big data”: aplicaciones en el mundo del deporte
Desde el smartwatch que registra los kilómetros recorridos, las calorías quemadas o la actividad física realizada hasta el análisis que permite realizar el big data para detectar estilos ganadores, fórmulas para mejorar el rendimiento de los deportistas o incluso cómo llegar mejor a los espectadores de algún evento deportivo.
Independientemente del sector del negocio, queda claro que el potencial del análisis de datos para conseguir con los objetivos de manera eficiente y optimizando los recursos es impresionante. Cognodata tiene como meta ayudar a las empresas a lograr dichos objetivos aplicando soluciones tecnológicas. Y es que el análisis de datos ha llegado para quedarse y las empresas que no lo apliquen en sus estrategias estarán perdiendo oportunidades de negocio. Esperamos haber resuelto algunas dudas con estos ejemplos sobre big data: aplicaciones para la vida real en los ámbitos de la banca, la política, la automoción, la sanidad o el deporte.